Thursday, October 4, 2012

5 formas para convertirse en adultos crédito

Deje que la palabra Jr.: bancos, corredores de hipoteca, compañías de tarjetas de crédito, agencias, cobradores de deudas, los prestamistas del día de pago de informes de crédito. Piensa en palabras como "difícil" y "complejo", "caja negra" y "miedo". Mayoría de los consumidores, digo, para expresar el miedo a lo desconocido y el miedo de ser humillados en la caja registradora, restaurante, frente a amigos y familiares. Imagínate, si se quiere, eres un adulto en su circuncisión. ¿Cómo se llama?  ¿Lo que quieren de usted? Ellos tienen el derecho a rechazar una casa, coche, apartamento, educación, incluso el trabajo que desea, o copiar tus cosas de las manos.

Hay un nuevo mundo de posibilidades de los consumidores por ahí. Gracias a las leyes como la ley Dodd-Frank de tarjeta de crédito y gente como Elizabeth Warren, que ha defendido durante mucho tiempo los consumidores y empresarios honestos exigente sistema, impulsado por la alfabetización financiera, donde el terreno de juego existe gracias a la transparencia, la divulgación y fácilmente todos los comandos, el mismo conjunto de reglas bien definidas.

Frutas de Warren recientemente celebran su primer aniversario. La Oficina de protección del consumidor financiero ya está haciendo grave carretera es más cortos, más claros contratos hipotecarios y tarjetas de crédito; Honestamente, evaluación de bienes de consumo y servicios; la solicitud y la publicación de las quejas del consumidor y las respuestas a los mismos; estudio de diversas tendencias del consumidor; Desarrollo, aplicación y cumplimiento de normas y reglamentos que son competencia de negocios y no anti-legitimate.

Aunque está todavía en funcionamiento, nunca ha habido un momento más oportuno como un CFPB actualmente proporciona todo tipo de socio el empoderamiento económico de los consumidores estadounidenses. Por lo tanto, como nosotros requerimos que un negocio se vuelve más responsable ante el pueblo estadounidense, ahora es nuestro turno para exigir una mayor rendición de cuentas. Es hora de un cambio en nuestra manera de pensar.



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